Si bien sabemos que un tema de preocupación a nivel mundial desde hace tiempo es el Calentamiento Global y que uno de los factores que está acelerando este fenómeno es la contaminación, es bueno reconocer que los seres humanos somos los responsables de esto ya que diariamente producimos cientos de toneladas de basura, consecuencia del consumismo y que:
Ahora bien, ¿qué podemos hacer –en lo individual –para ayudar a reducir la producción de basura?
Entendemos que la basura es todo residuo sólido urbano generado en nuestras casas como resultado de actividades domésticas y de los productos que consumimos. Éstos se pueden clasificar en orgánicos e inorgánicos.
¿Qué podemos hacer con ellos?
Los residuos inorgánicos son el resto de basura que no se desintegra con facilidad, necesitan mucho tiempo, incluso años, para hacerlo, por ejemplo: madera, cajas de cartón, plástico duro de cubetas, juguetes, micas, plumas, tapas, botellas, envolturas de dulces, galletas y frituras o de otros alimentos o productos, metales, bolsas de plástico, también el aceite, detergentes, pinturas, entre otros. Algunos de los residuos mencionados y otros más podrían ser reutilizados o reciclados.
En próximas publicaciones seguiremos profundizando en esta temática.
¡Mientras más consumimos, más basura producimos!
Ahora bien, ¿qué podemos hacer –en lo individual –para ayudar a reducir la producción de basura?
Entendemos que la basura es todo residuo sólido urbano generado en nuestras casas como resultado de actividades domésticas y de los productos que consumimos. Éstos se pueden clasificar en orgánicos e inorgánicos.
¿Qué podemos hacer con ellos?
Los residuos orgánicos son restos de comida o de jardinería que podemos utilizar como abono para plantas al hacer composta, ya que éstos se desintegran con facilidad siendo absorbidos por la tierra, enriqueciéndola.
Los residuos inorgánicos son el resto de basura que no se desintegra con facilidad, necesitan mucho tiempo, incluso años, para hacerlo, por ejemplo: madera, cajas de cartón, plástico duro de cubetas, juguetes, micas, plumas, tapas, botellas, envolturas de dulces, galletas y frituras o de otros alimentos o productos, metales, bolsas de plástico, también el aceite, detergentes, pinturas, entre otros. Algunos de los residuos mencionados y otros más podrían ser reutilizados o reciclados.
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